El día se hace largo y después llega la semana. Y no soy una avestruz pero reivindico mi derecho a serlo. No se me ha concedido la respiración bajo tierra, pero querría guardar, por un tiempo, ojos, orejas y corazón. Sin dramas. Un momento, que ahora vuelvo, y cabeza al suelo.
2 comentarios:
¡Está muy guapo tu blog!me ha chiflado precariedad. Bs!
El cuarto de baño es una técnica alternativa a la "cabeza al suelo" que tiene bastante (todo) de avestruz.
"Cabeza al suelo" -sensu stricto- tiene los inconvenientes de chichones y dolores ;)
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